Sueños de un director: Vivir es fácil, si es en Almería

Al pensar en John Lennon yo pienso, sobre todo, en su muerte. Cada 8 de Diciembre el Beatle aparece en mi mente. Y no es que sea tan beatlemaniaco que tenga esta fecha marcada en el calendario. Simplemente es porque yo cumplo años el 9. Para ser más exactos, lo cierto es que nací pocas horas después de la muerte de Lennon, el 9 de Diciembre de 1980, de madrugada, cuando el cantante murió la noche del 8. Circunstancia esta que he usado más de una vez para autoproclamarme sin modestia y con total desfachatez su reencarnación. De momento sólo tenemos en común las gafas, ¡pero al tiempo!

Pero al pensar en Lennon pienso tambien en otras cuantas cosas: la casa de mi hermano a escasos 100 metros de Penny Lanne; las cervezas en The Cavern, el disco rojo y el disco azul...y, que curioso, La casa del Cine, en Almería.

Llegué a esta casa-museo de la mano del crítico de cine y Jefe de la sección de Cultura de La voz de Almería Evaristo Martínez y me encontré con un lugar sólo apto para frikis, cinéfilos o mitómanos, o todo a la vez como era aquel caso. Y es que La Casa, como museo, guardaba entre sus paredes recuerdos y reliquias de un pasado glorioso vivido en esta tierra, donde se rodaron tantas y tan buenas películas como "Lawrence de Arabia", "Indiana Jones y la última cruzada", "Patton", "Los siete magníficos" y sobre todas ellas la llamada por algunos “trilogía del dólar” y conocidas comúnmente como “las de Leone”, “Por un puñado de dolares”, “La muerte tenía un precio” y “El Bueno, el Feo y el malo”.

Para colmo La Casa, como casa, había sido el lugar de hospedaje de muchas de todas aquellas estrellas del firmamento perdidas en ese soleado y desértico rincón del mundo por exigencias del guión. Según cuenta su entusiasmado y quisquilloso guía, bajo ese mismo techo llegaron a convivir Yul Brynner, David Lean, Peter O´Toole, Sam Spiegel y varios más, compartiendo veladas, chismorreos de la industria e impresiones sobre aquel otro huésped que poco o nada tenía que ver con su gremio: John Lennon.

Uno de los pasillos de La Casa del Cine

Como sucedía con sus colegas de casa, pocos sabían que Lennon se encontraba perdido en ese alejado rincón de Almería, rodando la inclasificable película “Como gané la guerra”, meditando abandonar el grupo y componiendo los primeros acordes de una de sus obras maestras, "Strawberry Fields forever". Según parece, aquellos jardines que rodeaban la casa transportaron al cantante al orfanato, y de esos recuerdos surgió la canción. Por supuesto, La casa se atribuye no sin razón el mérito de la existencia de dicha obra, y dedica toda una habitación –la que él habitó- a John Lennon, su estancia y su canción. Una entrevista al cantante, unas cuantas fotos y, según dicen, el primer disco de la historia con la letra de las canciones impresas en él. Pues fue un almeriense el que durante esos días le recomendó a Lennon que lo hiciera y este no sólo lo hizo sino que le mandó la primera copia. Una anécdota genial que David Trueba ha convertido en la ganadora de los Goya.

El primer disco con las letras de las canciones
impresas.

Pero Evaristo me contó después la leyenda que el guía desconocía: Que Lennon se fue antes de tiempo porque su comportamiento dejaba que desear. Que ello impidió que Harrison visitara a su colega como tenía previsto; y que el hecho de volver antes a Inglaterra hizo que Lennon conociera a Yoko Ono muy pocos días después en una exposición a la que no hubiera asistido de quedarse en Almería.

Y volvemos al principio: si, como se da por hecho, la culpa de todo la tiene Yoko Ono –la ruptura de los Beatles, la muerte de Lennon, el fin de la música y todo lo demás...- ¿No deberíamos fijar nuestras iras contra aquella Ama que decidió echar al cantante por ruidoso y alborotador originando así el fatal encuentro posterior? ¿No se encuentra en La Casa del cine, Almería, el principio de aquello y la razón de todo, de todo lo malo, de todo esto??.

Con tanto entrelazado entre leyenda y realidad ya ni siquiera se de que va este post. ¿La casa del cine?. ¿Anecdotario almeriense?. ¿Invitación a ver la última de Trueba?. Poco importa, creo yo, si sirve para hablar de John Lennon.